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jueves, 25 de marzo de 2010
Sam Worthington 2010
Las dos caras de Sam Worthington
Él es el protagonista de la película más grande de todos los tiempos, Avatar, y ahora El choque de los titanes, pero la intensa Aussie siquiera reconoce el tipo que ve en el espejo?
Una mañana temprano en el año 2006, justo después de su 30 cumpleaños, Sam Worthington se arrastró de la cama en la casa que tenía alquilada en un suburbio de Sydney, caminó hasta el espejo, y frunció el ceño. No le gustaba lo que estaba viendo. La cara, su principal herramienta como actor, era el mismo que había sido el día anterior: preternatural de mandíbula cuadrada, de labios delgados, ojos entornados-, la frente grande, expresiva anotó con tres líneas de surcos silenciado, el rojizo de la piel y rosado como un jugador de rugby y oscuro alrededor de los bordes por una omnipresente nimbo de pescuezo barba. Pero no fue la cara que le estaba molestando. Era el tipo que usa es el siguiente: una estrella de cine menor, semi-famosa en Australia, pero en otros lugares anónimos, un niño inconexa que había caído en que actúen en una alondra-menos de una alondra, en realidad-, realizó un éxito si van a medias de la misma. Una serie de televisión pocas, algunas películas, un premio o dos, un poco de sombra. Pero el hombre en el espejo, se dio cuenta de Worthington: Él no se había ganado cabotaje sido cualquier cosa-había. La aceptación de funciones debido a que el co-estrella se caliente. Rolling directamente desde una barra a la fijada para la 6:15 AM llamada. Canalizar sus cheques de pago en acumular todo esto-y aquí la mirada por la habitación y alrededor de la casa, en todos los muebles y electrodomésticos y un surtido de juguetes por el hombre-todos los de esta mierda, pensó.
Así que vendió el espejo, que resolvió el problema inmediato. Y con ella, vendió todo lo demás, la solución-o al menos el desguace de las pruebas de-la más grande, cuestión más existencial. Pegó una etiqueta de precio en todo lo que poseía, invitó a todos sus amigos en casa, organizó una subasta con un mazo de buena fe que subastó también. "Mis compañeros llegaron alrededor, diciendo:" ¿Cuánto cuesta la caldera? '", Recuerda. "Me dijo 'Cinco dólares. A partir de las cinco. ¿Escucho seis? Seis? Vendidos, por cinco dólares!" Fue el microondas. El televisor fue. El sofá se fue. Los cuchillos y tenedores se fue. Todo ha ido, a excepción de los libros Worthington, que asumió ninguno de sus amigos querían-señor de las moscas, alguien?-Y que, como un sentimental literaria, no importa el mantenimiento de todos modos.
Cuando todo había terminado, Worthington se había reducido a dos sacos de libros y ropa, una caja de mierda "" Toyota Camry, unidos con cinta adhesiva y apodado Gloria, en el que tenía la intención de vivir, y dos de los grandes en efectivo. Él no comprendía lo que había hecho justo "reiniciado" su vida, diría más tarde, golpeó el "control-alt-suprimir", me decía-pero había purgado algo, arrojar algún tipo de piel falsa, quemaron una especie de puente, se desató a partir del mundo y de todo lo que había visto le devolvía la mirada en el espejo. Sentado en ese auto caja de mierda, sin embargo, no pudo evitar la captura de la vista de sí mismo en el espejo retrovisor y me pregunto: ¿Qué mierda ahora?
Es cuatro años más tarde, y Sam Worthington acaba mismo espiado en otro tipo de espejo. Ahí está, en la pantalla de un televisor sintonizado a silenciado Entertainment Tonight que está en el cuarto verde en Smashbox Studios de Los Angeles, caminar por la alfombra roja en los Premios Globo de Oro la noche anterior: Sam Worthington, un avatar sonriente en un traje negro negro con corbata estrecha, a la deriva en la visión periférica de lo corpóreo, aquí y ahora Sam Worthington. Se detiene, mitad de la frase, y mira arriba en la pantalla. "Bueno, eso es raro", murmura, como fulminado, por primera vez, por su propia ubicuidad. Se observa por un momento, no en vano, pero curiosamente, como un perro procesos de un olor desconocido, y mira hacia otro lado antes de que la televisión se hace mostrándole. Había estado hablando de la falta de definición de la noche anterior acerca Starstruck está cumpliendo con Mike Tyson, codeándose con los "grandes"-lo que puede explicar algunas de las rarezas de la misma, pero hay otra rareza en el juego así: el viaje de cuatro años a este punto, desde que viven en la parte posterior de un Camry en Australia para ser-para este momento candente de todos modos, la mayor estrella de cine en el planeta.
No es que él mira, o actos, la parte ahora. Está vestido con una simple T-shirt negro y anodino blue jeans y usar el mismo par de botas raspadas albañil Blundstone de que a veces usa en las alfombras rojas. Entre toda la gente presente en los asistentes foto de estudio, varios controladores de Hollywood, la publicidad Mölls-Worthington parece más como si alguien les paga por hora, como él está aquí para desatascar un desagüe. Dedo del pie-LA para tocar sólo unos días entre las fechas de rodaje, él está aquí para una sesión de fotos-"para el New York Times", dice, aunque en realidad no es seguro-que él encuentra tan terrible como hacer entrevistas. Hablando de sí mismo, por el que se desnuda para él un desconocido que blandía el bloc de notas, decir lo que piensa sólo para ver "las cosas tontas que yo digo" ven boomerang de vuelta en él en 12 puntos tipo que lo odia. "Todavía soy un joven muy bulliciosa", dice, en su hirsuto acento australiano. "Y te juro un poco más de lo que debería. Así que estoy aprendiendo a regular este proceso, ¿sabes?"
"Es lo contrario de narcisista", dice James Cameron, que podría llamarse el padrino de Worthington hadas para depilarse lo de semi-oscuridad y arrojándolo, contra la resistencia de estudio poderosos, como el protagonista de "Avatar", que se convertiría en la película más exitosa de la historia hizo. "Él no juega el juego de Hollywood. Él no está aquí para hacer amigos". Eso ayuda a explicar la antipatía hacia las entrevistas. Un albañil sola vez, en calidad Worthington considera nada más y nada menos que un puesto de trabajo "Levántate por la mañana, ir a trabajar, hacen que el jefe feliz", en lugar de un llamamiento sagrado gu-pegajosos. Y hablando de trabajo, mientras que aparentemente parte de su trabajo, no es lo mismo que trabajar, que parece ser Sam Worthington en el interior y exterior del deseo: estar siempre, enérgicamente trabajo.
"Es una máquina", dice su co-estrella Avatar Zoë Saldaña, pero una máquina sin apagar un aparente. Este mes, las estrellas en Clash of the Titans, otra épica 3-D, esta una de las espadas y sandalias-variedad-Worthington interpreta al héroe griego Perseo junto a Liam Neeson y Ralph Fiennes. Dos de sus otras películas programadas para esta primavera-Last Night, un drama romántico con Keira Knightley y Eva Mendes, y la deuda, en la que Worthington costars con Helen Mirren, han tenido sus emisiones en suspenso por el colapso de Miramax Films. Pero él estaba en el ritmo de cabeza al tener cinco películas-cuenta Avatar y el verano pasado Terminator Salvation-salen en un lapso de 12 meses. "Odio el tiempo de inactividad", dice Worthington, echando una mirada a los asistentes con fotografía y controlador de tipos que están disfrutando de su descanso pre-tira con un juego desordenado de ping-pong en la sala verde. "Esta es la primera vez que he tenido tiempo libre. Lo odio." Es evidente que esto no es un hombre descansando en sus laureles, o en cualquier otra cosa.
Para entender esa inquietud, sin embargo, es comenzar a entender Sam Worthington-o por lo menos Sam Worthington que emergió de momento su hombre en el espejo-y venta de vida posteriores a la liquidación. Hay un antes y un después en la vida de Sam Worthington, va algo como esto. Antes: Su infancia, cerca de Perth en Australia Occidental, era un estándar-edición australiana de una actividad frenética, actividades al aire libre, marcada por el fútbol y el surf. "Yo no soy un gran fan de las personas que dicen que poner una hoja en el patio trasero cuando tenían 7 y entretenidos a todos los vecinos", dice. "Cuando tenía 7 años, pensé que era un camión de bomberos de mierda." Nada de teatro de jóvenes, en otras palabras. Ni siquiera un espectáculo de marionetas. "Al crecer, que tendían a ir sólo a través de la escuela para salir", dice, "y luego averigüe lo que quiere hacer en esta gran bola de barro."
Cuando Worthington tenía 17 años, su padre, un trabajador de la central eléctrica, le dio cien dólares, un billete de ida a Cairns, en la costa opuesta del país, y las instrucciones para "el trabajo de su camino de regreso." Worthington deriva a Sydney, encontró un trabajo por el que se ladrillos. "Mis compañeros eran trabajadores, sus padres eran trabajadores, por lo que hacer eso para obtener su dinero de bolsillo", dice. Dos años más tarde, un rastas Worthington iba con una novia, una aspirante a actriz, para su audición en el Instituto Nacional de Arte Dramático. Para el "apoyo moral", dice, hizo una prueba a su lado. Se puso en, ella no lo hizo-y rápidamente lo dejó.
No era precisamente la quema con la ambición teatral-pensó Chéjov era ese tío de Star Trek. Lo que sí tenía, sin embargo, fue un trabajo de cuello azul ética y una voluntad de "hacer nada". Él consiguió un trabajo bien actuando fuera de la escuela. Luego otro. -Entonces, que engendra la película otra película, "dice," y todo el mundo va en Australia, "Ohhh, tú eres la próxima gran cosa". Le dan otro. Así que su trabajo duro trabajo engendra ".
Pero tal vez no satisfacción, y es aquí donde llegamos a la siguiente. Worthington se estaba divirtiendo, pero después de un giro trabajando junto a Abbie Cornish en la película indie de Australia 2004 Salto mortal, en la que interpretó el hijo de un agricultor sexual confusa, decidió levantar su juego necesario. "He perdido el tiempo", recuerda diciendo para sus adentros. "¿Qué estaba pensando? Que podría haber estado aprendiendo más en vez de ser como, 'Oh, eso es un trabajo impresionante, el hombre. Ella es una guapa co-estrella-I podría intentar para eso. Ya sabes, todas las cosas dudosas en sus veinte años. " Pero el trabajo más duro, más sobria, más en serio-que aún no ha sido suficiente. Y fue entonces cuando Worthington sufrió su hombre en el espejo del momento. Leve mejoramiento de sí mismo, decidió, no lo corte, tenía que empezar de nuevo, desde cero. "No sé si puedo explicarlo", dice. "Si pudiera, lo haría mucho más fácil. Pero el propósito era que no podía explicarlo."
Dos semanas más tarde, recién entrando en su coche, Worthington envió una misteriosa llamada de algún agente del casting le deseo a una audición para una película americana. Apenas había el dinero suficiente gas para hacer que la unidad. "Pero pensé, bueno, al menos puedo llegar a actuar hoy", dice. "¿Y qué hacía yo de todos modos? Yo vivía en mi auto, tratando de averiguar lo que quería hacer." La cinta de la audición fue a Hollywood, donde Cameron, vistos Worthington decir su primera línea ("Uh-huh") e inmediatamente decidió que había encontrado la cabeza de "Avatar", su primer largometraje desde Titanic.
"Es difícil encontrar un tipo que trabaja para las mujeres y los hombres", dice Cameron. "Con una gran cantidad de actores, las mujeres los aman, pero no inspirar a los hombres. Yo necesitaba a alguien que pudiera conducir a los hombres a la batalla." Worthington, dice, "era el que iba llena de Shakespeare." Ellos se conocieron, se ha hecho clic. "Me impresionó como un tipo duro", dice Cameron. "Tenía un flintiness de él". El estudio, sin embargo, no se vendió como en lo desconocido en ciernes como Cameron, quien libró una batalla de seis meses para emitir Worthington. "Jim llamar y decir: '¿Dónde estás?'", Recuerda Worthington. "Yo diría:" Yo todavía estoy en el coche, amigo. Estoy esperando para ir a trabajar '". Parpadeó El estudio. Ya sabes el resto.
"Estoy muy tomadas con el viaje que lo llevó aquí", dice Joseph McGinty Nichol, más conocido como McG, quien dirigió Worthington en Terminator Salvation, mientras que Cameron estaba editando en línea. "Es una historia muy bohemia". Es, sin embargo, en algunos aspectos Worthington no ceñirse al estereotipo bohemio. Él rehuye, por ejemplo, de la palabra arte. Para el sello tiene una especie de connotación raro ", dice," porque puede sonar como si se va hacia arriba el puto culo si usted dice eso ". En la escuela de teatro, cuando Worthington se le pidió que el nombre de su película favorita: "No me pida mi juego favorito porque sabían que yo no había visto uno-se turded la ponchera respondiendo a Lethal Weapon 2. "Me miraron como si estuviera loco", recuerda. "Creo que estaban pensando, oh, Casablanca, Lo que el viento se llevó. Pero yo le dije: 'Mira, si yo puedo tener la mitad de divertido que los niños y se les paga para hacer lo que están haciendo, eso es muy bueno." "
Worthington no ha abandonado esa inclinación populista. "Él es llevado a la excelencia personal como él lo define," Cameron dice, "no como todos los demás lo define. Él no hace las distinciones que hacen otros actores, como en:" Voy a hacer esto otro para el dinero, entonces esta película indie poco por el arte. " Sam no a todos ellos por el arte. Esa es una diferencia muy notable entre él y otros actores. "
Si ese lado bohemio no siempre es evidente en su obra, donde sus principales funciones ni siquiera han participado de buena fe personajes humanos (hombre-robot en Terminator Salvation, el hombre-extranjero en Avatar, el hombre-dios en Clash of the Titans), es obvio en su estilo de vida. "Me pueden sobrevivir con nada", dice, y en cierto sentido, a pesar de los millones que ha recaudado desde que firmó a "Avatar", lo que hace. "No podría dar una cogida por el dinero", dice McG. "Él es sin hogar, personas sin hogar o casi-No creo que él tiene un lugar para colgar su sombrero. Tiene dos bolsas. Libros en uno, la ropa en la otra." Esto quiere decir que él no ha cambiado mucho desde que todo lo que fuera subastado, y luego se agachó en una juerga de trabajo que los que no muestran síntomas de reflujo. Es cierto que es objeto de comercio de la caja de mierda Camry de las habitaciones muy bien equipadas, que entra y sale de ("Me gusta el servicio de habitaciones", admite. "Le pusieron un chocolate en mi almohada. Es un poco fresco"), pero sigue siendo el mismo "gitano existencia", como Cameron lo llama. Worthington ni siquiera tienen un teléfono móvil, prefiriendo pasar de un teléfono los estudios de la fuerza sobre él durante la producción a la siguiente. Y la fama? Al carajo. Si hubiera querido la fama, él ha dicho, se podría haber ido a Gran Hermano.
"Mucha gente podría decir:" Quiero estar en portadas de revistas. Yo quiero tener el dinero suficiente para comprar una casa '", dice. Para Worthington, sin embargo, el objetivo no es tan tangible. "Si se concreta," dice, "espero que no lo haría, para ser honesto."
"Sam es siempre overthinking todo", dice Saldaña. "Él es sensible a tantas cosas que la gente normal damos por hecho. Que hermosa es la calidad lo que le quita el sueño y lo que le hace inquieto." Su identidad fundamental, de acuerdo a McG, "viene de un hambre. Él sabe muy bien lo que es no tener esa llamada de teléfono." Y así que él sigue trabajando, trabajando, al parecer inmune a los peligros de la fama y la fortuna ("Si empieza a caminar en una chinchilla rojo, pensando que eres mejor que todos", dice Worthington, "vas a parecer una gilipollas "), manteniendo un énfasis firme, rígido en el tiempo transcurrido desde que un director grita" ¡Acción! " y cuando grita "¡Corten!" Cameron, dice Worthington, una vez que se maravilló de su falta de interés en el largo plazo. "'Usted no es ni siquiera pensar en lo que la película va a hacer'", dice el director le dijo. "'Te doy un problema y resolverlo, y resolverlo en un día." Y eso es cierto. Eso me gusta. Es como ser un gruñido en el ejército. "
Eso no se traduce necesariamente en la obediencia ciega. Worthington es espinoso y propenso a fuertes, a veces gritó opiniones. Cuando Christian Bale, su co-estrella de Terminator Salvation, se convirtió en una sensación de Internet y un remate tarde en la noche después de audio de un infame diatriba en el set se filtró, Worthington supuestamente le dijo a Bale, "Estoy esperando a mi diatribas a salir." "La gente como Sam te asusta al principio", dice Saldaña, "porque todos estamos tan acostumbrados a vivir en el gris. Sam es muy negro y blanco." Según su propia confesión, fue despedido de una telenovela australiana para hacer muchas preguntas, y cuando él estaba para arriba para el papel de James Bond que fue a Daniel Craig, que supuestamente le dijo a "Casino Royale" el director Martin Campbell que la idea de Campbell de Bond fue todo mal, citando su propia interpretación, más oscura de las novelas de Ian Fleming. (Él es ahora el favorito para suceder a Craig como el próximo 007.) "Bueno, exijo mucho", dice, y luego da marcha atrás, no queriendo posicionarse como una especie de diva. "Exijo la excelencia en mí mismo. Estoy al frente y abierta del todo, pero te voy a dar todo".
En ese momento, una pelota de ping-pong viene rebotando por la habitación, puesto en marcha por una foto de los asistentes al ralentí, y se trata de una parada debajo del banco en el que está sentado Worthington. No es la primera vez que esto ha sucedido. "You suck", un jugador le dice a la joven que ponchó el balón, a lo que ella responde "sí, quiero. Hago chupar." Como se acerca Worthington, que está cavando debajo de la mesa a buscar la pelota, dice, "Estoy tan avergonzada." Se lanza la pelota de ping-pong de nuevo a ella, y luego, como si estuviera hablando con el chico en el espejo hace cuatro años y la divulgación de un credo aplicables a mucho más que tenis de mesa, él le dice, "No se sienta avergonzado. Obtener mejor ".
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